De los doce estados que eligieron gobernador en 2016, en 10 hubo pérdida de dinamismo en su actividad económica durante el periodo de la administración saliente, siendo Puebla la que presentó la desaceleración más pronunciada de 5.6 a 0.8 por ciento.
Lo anterior de acuerdo con un análisis del periódico El Economista, que especificó que entre los estados con cambio de poder, Veracruz fue la única entidad que se colocó en un fase de recesión al pasar de 2.9 a -0.6 por ciento.
Los estados que tuvieron elecciones fueron Puebla, Veracruz, Durango, Oaxaca, Tlaxcala, Quintana Roo, Zacatecas, Hidalgo, Tamaulipas, Chihuahua, Sinaloa y Aguascalientes.
Después de la entidad poblana, los estados de Durango (de 3.8 a 1.8 por ciento) y Oaxaca (de 3.6 a 1.7 por ciento) fueron los que mostraron una mayor pérdida de dinamismo económico.
Por su parte, en el tema del mercado laboral, si bien Veracruz y Oaxaca fueron los únicos estados que incrementaron su tasa de informalidad laboral del segundo trimestre del 2010 al tercer trimestre del 2016 –según datos del Inegi–, los 12 territorios considerados se encuentran arriba de 35 por ciento de su población ocupada en esta condición laboral.
Editado por Lorena González Guzmán
Fuente: El Economista