Delegados del PRI repartirán mitad de diputaciones locales de Puebla
Delegados del PRI repartirán mitad de diputaciones locales de Puebla. Foto: Google maps
Delegados del PRI repartirán mitad de diputaciones locales de Puebla
Delegados del PRI repartirán mitad de diputaciones locales de Puebla. Foto: Google maps

Ante la posibilidad de que el PRI pueda ir el gobierno de coalición con el PAN, militantes del tricolor pidieron al CEN decir no pues de aceptarlo sería ir “en colusión con un disfraz” de la mano de quienes llamaron los causantes del “retroceso democrático” en la entidad.

Lo anterior mediante un desplegado dirigido a la delegada del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del partido, María Esther Scherman Leaño, y al líder estatal, Javier Casique Zárate, que está firmado por un grupo de 36 priistas entre ellos Iván Galindo Castillejos, Jorge Arroyo García, Juan Manuel Vega Rayet, Germán Sierra Sánchez y Valentín Meses Rojas.

Respecto a la decisión que deberá tomar el CEN del PRI en caso de que Martha Erika Alonso Hidalgo sea ratificada como mandataria y así ir en gobierno de coalición, los priistas que se llama disidentes lo rechazaron, sobre todo si quienes lo promueven son militantes “de élite” que no representan a las bases del partido.

“Esas personas buscan un beneficio personal y no institucional”, indicaron, luego de que trascendió que el excandidato priista a la gubernatura, Enrique Doger Guerrero, obtendría alguna secretaría con Alonso Hidalgo si el tricolor va con dicha figura con la panista.

Llamaron a que, como partido político, esperen a conocer el resolutivo del Tribunal Electoral del Estado de Puebla (TEEP) en cuanto a la gubernatura, para así fijar su postura, ya que cualquier pronunciamiento antes del fallo será fuera de lugar.

 

Consulta a la base para renovar dirigencias

En cuanto a la renovación de las dirigencias, exigieron que se realicen con “estricto” apego a los tiempos que marcan las normas del PRI, así como pidieron que el método sea el de elección directa por la base militantes.

Todo esto porque, afirmaron, tras la elección del 1 de julio y la derrota del PRI por los pocos puestos que logró, el partido debe reconocer que no estuvo a la altura de las exigencia ciudadana ni como gobierno ni oposición.

“En Puebla, durante el último sexenio, padecimos años de represión, de persecución política a quienes pensaban diferente (…) y desafortunadamente los priistas, o mejor dicho las cúpulas que ‘representaban’ a los priistas no supieron comportarse como verdadera opción de cambio”.

También reprocharon al CEN de restarle importancia a Puebla, lo que causó el detrimento de los resultados y conminaron a reflexionar y, a recomponerse para aspirar a obtener el respaldo ciudadano.