La Cámara de Diputados aprobó, en lo general y particular, la Ley de Austeridad Republicana, que establece, entre otras, restricciones de 10 años a altos exfuncionarios federales para trabajar en la iniciativa privada y de pensiones a expresidentes.
En la noche de este martes, el dictamen de dicho ordenamiento, así como las reformas a las leyes de Responsabilidades Administrativas, y de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, quedaron aprobados con las modificaciones del Senado, por 272 votos a favor, 154 en contra y 3 abstenciones, por lo que fueron enviados al ejecutivo para su promulgación.
Sobre la restricción de 10 años a exfuncionarios para trabajar en empresas, la nueva legislación precisa que se trata de las compañías que hayan supervisado, regulado o tenido información privilegiada.
También prohíbe contratar con recursos públicos cualquier tipo seguros de separación individualizada o colectiva, de gastos médicos privados, de vida o de pensiones para los servidores públicos, incluidos los expresidentes, que sólo recibirán las correspondientes del Issste.
Cancela la compra o arrendamiento de vehículos de lujo o cuyo valor comercial supere las cuatro mil trescientas cuarenta y tres Unidades de Medida y Actualización (UMA) diaria vigente para el transporte y traslado de los servidores públicos.
Asimismo, impide constituir fideicomisos de salud, educación, procuración de justicia, seguridad social y seguridad pública, excepto cuando estén previstos en la ley o tratados internacionales firmados por México.