Algunos grupos de estudiantes de la BUAP pidieron a la administración central reconsiderar que personal de la DASU verifique un código QR a cada estudiante para ingresar a las instalaciones, pues señalaron que no todos tienen celular y se retrasa el acceso fluido.
En ese sentido, Mariana Martínez, alumna de la Facultad de Filosofía y Letras e integrante del movimiento Espartaco, sostuvo que, en la BUAP, como universidad pública, no se debe restringir el acceso tanto a los alumnos como a las personas ajenas a la institución.
Comunicó que hay ciudadanos que desean ocupar los libros de la Biblioteca Central, ubicada en Ciudad Universitaria, pero tienen dificultades para acceder con el código QR y el personal de la Dirección de Apoyo y Seguridad Universitaria (DASU) les condiciona la entrada.
Afirmó que alumnas y alumnos de distintas unidades académicas, entre ellas, Filosofía y Letras, Economía, Derecho y Biología, también sostienen que dicha medida debe ser reconsiderada, pues señalan que es necesario normalizar la asistencia presencial a clases y el uso libre de las instalaciones tras dos años de confinamiento, a fin de evitar rezagos educativos.
Hay opiniones encontradas
Los integrantes han pedido desde julio pasado que no se restrinja el ingreso a Ciudad Universitaria y los servicios brindados dentro de este espacio. Añadieron que también el tiempo para ocupar las instalaciones deportivas está restringido, a 60 minutos únicamente.
Otro grupo que también pide dejar atrás la verificación del QR, así como permitir el libre acceso a CU, es el Bloque Revolucionario Estudiantil y Popular (BREP), cuyos integrantes se manifestaron el lunes en uno de los accesos a la universidad.
Por otra parte, en redes sociales, otros estudiante consideraron que el acceso con QR a la BUAP los hace sentirse más seguros, ya que antes de generar el código deben responder un cuestionario para descartar que tengan síntomas de Covid-19, además de que consideran de que así se evita el acceso de gente “ajena” a la comunidad universitaria.