El presidente Andrés Manuel López Obrador reveló que tras perder las elecciones de 2012, pensó en dar a conocer que ya no volvería a participar como candidato, debido a la campaña en su contra, pero decidió hacerlo por la dificultad para encontrar “un relevo”.
En la conferencia de prensa matutina, destacó que un acto en el zócalo de la Ciudad de México plantearía que tras no ganar en las elecciones presidenciales de 2006 y 2012, ya no participaría y sólo trabajaría en la conformación de Morena, así como por sus “convicciones y principios”.
Explicó que hace 10 años, los “conservadores” hablaban de que él era un “ambicioso vulgar” y que estaba “obcecado con ser presidente”, cuando no le han interesado los cargos públicos, sino que lucha “por principios”.
Agregó que lo anterior fue una de las causas principales para que pensara en dejar de ser candidato, además de que “no se habían presentado las circunstancias” o bien “no había sabido hacerlo”, para que ganara en los comicios.
Cabe recordar que López Obrador perdió las elecciones de 2006 ante Felipe Calderón Hinojosa, por un margen reducido y en medio de acusaciones de fraude y en 2012 ante Enrique Peña Nieto, a quien señalaron de aplicar una compra masiva de votos.
No iba a ser fácil tener relevo, dice
No obstante, dijo el mandatario, pensó que “sin caer en el necesariato” podría ayudar a que se llevara a cabo la transformación del país y que “sin sentirme insustituible las circunstancias me habían puesto en lugar donde actuaba como dirigente”, además de que no iba ser fácil tener “un relevo”.
Reiteró que una vez que termine su mandato en septiembre de 2024, se jubilará y no participará en política, pues habrá cumplido un ciclo, además de que ahora sí existe un relevo o “varios”, en referencia a presidenciables como la jefa de gobierno de la capital del país, Claudia Sheinbaum Pardo, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, y el de Gobernación, Adán Augusto López Hernández.