El gobierno de Puebla denunció ante la FGE al empresario Jacobo Martínez Ramos, dueño del hotel BanyanTree, antes Rosewood y Talavera Azul, por dañar y apropiarse de inmuebles históricos, como los Lavaderos de Almoloya, y el convento Trinitarias.
Los delitos denunciados ante la Fiscalía General del Estado (FGE) en contra de Martínez Ramos son daño en propiedad ajena y a monumentos históricos.
Los lavaderos de Almoloya de Juárez, ubicados en la zona de San Francisco, de Puebla, y catalogados como Patrimonio Cultural de la Humanidad, fueron cerrados al público en junio de este año por afectaciones generadas por la ampliación del túnel que hizo el empresario, quien lo tenía en su poder, a través de un fideicomiso.
Asimismo, el empresario tiene su casa en el convento de las Trinitarias.
Recuperaron ambos inmuebles
En mayo pasado, el gobierno de Miguel Barbosa Huerta recuperó los espacios de los Lavaderos de Almoloya, los túneles que resultaron ser desagües y el convento de las Trinitarias.
Estos espacios fueron entregados en un comodato, por el gobierno de Rafael Moreno Valle, a Jacobo Martínez Ramos en marzo del 2015.
En ese momento el empresario trajo al Rosewood, franquicia que perdió y su hotel se llamó después Azul Talavera, hoy es el Banyan Tree.
La inversión para la construcción de ese hotel, que se encuentra en el Barrio de El Alto, fue de 40 millones de pesos, en ese entonces.
LPR