El gobierno de México y Cuba trabajan en la elaboración de un protocolo sanitario para poder comercializar ganado y animales silvestres para minimizar los riesgos de introducción de plagas y enfermedades; ello implica armonizar diversos requisitos zoosanitarios.
Al reunirse con el director general del Centro Nacional de Sanidad Animal de la isla (Cenasa), Cristóbal Arredondo Alfonso, el director en jefe del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), Javier Calderón Elizalde, destacó que ambos países son pueblos hermanos, con grandes vínculos en materia de salud humana, animal y vegetal, y con un estrecho historial de colaboración técnico–científica.
Esta armonización consiste en fortalecer métodos sustentables para erradicar plagas vegetales, como el control biológico, la Técnica del Insecto Estéril, y las técnicas de laboratorio para el control y erradicación de enfermedades animales.
Recordó que en la década de los novenstas, México erradicó la enfermedad hemorrágica viral de los conejos y posteriormente compartió las técnicas con la autoridad sanitaria cubana.
Calderón Elizalde enfatizó que el Senasica opera con la premisa de que la protección sanitaria no es un tema de países, son un tema de regiones, que sólo puede ser exitoso con el trabajo conjunto de sus agencias sanitarias.
En representación de la Coordinación de Asesores de Presidencia de la República, Adriana Guzmán Pérez, indicó que el intercambio de animales vivos es un tema que requiere estricto rigor científico, por lo que ambos gobiernos coincidieron en que se requiere establecer un protocolo específico de identificación oportuna de medidas de mitigación de riesgo.
El director general del Cenasa, Cristóbal Arredondo Alfonso, indicó que su país está interesado en importar de México felinos, camélidos y cérvidos, así como material genético de bovinos, principalmente, con el fin de potenciar la ganadería de la isla.
Destacó la estrecha colaboración que han desarrollado durante los últimos meses las direcciones generales de Salud Animal de ambos países, las cuales continúan trabajando en el desarrollo de análisis de riesgo para brindar certidumbre en los intercambios comerciales.