La Fiscalía de Puebla señaló que la desaparición de Ricardo Antonio Meneses Hernández la semana pasada, y cuyos restos fueron hallados en los límites con Tlaxcala, fue premeditada, pues la unidad en la que viajaba recibió más de 30 impactos, aunque no precisó cuál fue el móvil.
Por una parte, en la rueda de prensa de este jueves, el titular de la institución, Gilberto Higuera Bernal, dijo que la investigación se mantendrá hasta que se esclarezca en su totalidad este hecho, ya que evitó decir si están identificadas las personas que participaron los mismos.
Al decir que primero deben analizar todas las pruebas que se tengan, como la cantidad de impactos que recibió el vehículo en el que viajaba, así como a las actividades que hacía la víctima y los hechos que puedan estar relacionados tanto este como otros casos, al manifestar que es un suceso que los alerta.
“Creo que está más que claro que se trató de una agresión y privación de la libertad que parece totalmente premeditado, después de haber revisado una gran cantidad de videos y que podemos afirmar que fue una estrategia de hacer salir al joven para llevárselo y la intención era quitarle la vida”, expresó.
En tanto, Alejandro García Radiola, fiscal Especializado en Investigación de Personas Desaparecidas, informó que, de acuerdo con la denuncia presentada, el joven salió de su domicilio alrededor de las 2:30 de la mañana luego de que un vehículo gris, sin placas de circulación, chocó su camioneta que estaba afuera para reclamar que le pagaran los daños.
Detalló que se inició una persecución y la pareja sentimental del ahora occiso escuchó detonaciones, por lo que al salir a buscarlo a unas calles de ahí se halló a la unidad sobre el camellón del bulevar Esteban Antuñano.
Comentó que se hicieron más de 50 actos de investigación, análisis de videos de 29 cámaras de videovigilancia de la zona, registros vehiculares, y acciones conjuntas con la Comisión de Búsqueda de Personas, así como el levantamiento de cadáver del ahora occiso.
Dispararon 39 ocasiones contra camioneta
Explicó que en el vehículo que chocó la camioneta de Ricardo Antonio esperó hasta que el joven saliera, quien los siguió, pero dos calles después los tripulantes de otra unidad dispararon en 39 ocasiones, generando que impactara un coche y después chocara.
Tras esto, el joven abandonó la camioneta para huir a pie, cuando le dieron alcance en la calle 19 Poniente y 51 sur, en donde cuatro nombres con armas largas descendieron y se lo llevaron con rumbo a la autopista México-Puebla, siendo custodiada por tres vehículos más.
García Badiola refirió que además de los 39 impactos de bala, se hallaron en la camioneta de Ricardo seis manchas hemáticas, así como 29 casquillos percutidos a lo largo del trayecto que tuvo, sumado a que el vehículo que originó el choque tenía reporte de robo con violencia del 31 de mayo de este año.
El fiscal dijo que el levantamiento del torso se hizo el 12 de julio, en la carretera estatal Libres-Alzayanca, con la identificación de un tatuaje que tenía el joven, por lo que desde el lunes fue identificado y se mantienen las labores de investigación para dar con los responsables.
