Desde el 3 de diciembre de 2018, la Organización de las Naciones Unidades (ONU), declaró el 24 de enero como el Día Internacional de la Educación. Uno de los derechos humanos fundamentales que ayudan al desarrollo y a mejorar las oportunidades de vida.

La educación permite la población infantil y adolescente un desarrollo social, intelectual y la posibilidad de mejorar sus condiciones económicas.

 Si bien es considerada como un derecho fundamental, la ONU señala en el Día Internacional de la Educación que alrededor del mundo hay 244 millones de niños y adolescentes no han cursado estudios.

Así como que 617 millones de menores no saben leer y no cuentan con los conocimientos básicos de matemáticas y 771 millones de adultos están en una condición de analfabetismo.

Día Internacional de la Educación: escuelas, núcleo central

En el Día Internacional de la Educación es importante destacar el papel que juegan las escuelas como el núcleo de convivencia y aprendizaje.

 Aunque en la actualidad pensamos en las escuelas como un lugar en el que se brindan conocimientos, el origen de la palabra tiene otro significado.

En este Día Internacional de la Educación es importante recordar que la palabra escuela proviene del latín scholé, que puede interpretarse como “ocio” o “tiempo libre” .

Para conocer el origen de las escuelas debemos remontarnos a la época de Aristóteles (384-322 antes de Cristo), en la antigua Grecia.

La sociedad griega consideraba tres clasificaciones del tiempo: anapausis (descanso), ascholía (trabajo) y scholé (ocio).

Es justo el tiempo de ocio, el que los griegos consideraban como el dedica a alimentar de conocimiento el espíritu.

En aquella época, la educación era la combinación de dos aspectos: la enseñanza intelectual y la formación física.